
El mundo del merengue está de luto tras la trágica pérdida de Rubby Pérez, conocido como «La voz más alta del merengue». Nacido como Roberto Antonio Pérez Herrera el 8 de marzo de 1956 en Haina, República Dominicana, Rubby soñaba con ser beisbolista, pero un accidente automovilístico a los 15 años cambió el rumbo de su vida. Durante su recuperación, encontró en la música un nuevo propósito, aprendiendo a tocar la guitarra y alegrando a quienes lo rodeaban.

Su carrera musical comenzó en 1977 con la orquesta Los Pitágoras del Ritmo, pero fue en los años 80, al unirse a la agrupación de Wilfrido Vargas, donde alcanzó la fama con éxitos como «El Africano» y «Volveré». En 1987, inició su carrera como solista, consolidándose como una de las voces más potentes y queridas del merengue con temas como «Dame Veneno» y «Enamorado de Ella». Su talento le valió múltiples premios, incluyendo reconocimientos en los Premios Casandra y discos de oro y platino en Venezuela.

El 8 de abril de 2025, mientras ofrecía una presentación en la discoteca Jet Set en Santo Domingo, el techo del lugar colapsó, dejando a decenas de víctimas, incluido Rubby Pérez, quien falleció a los 69 años. Su partida deja un vacío inmenso en la música dominicana, pero su legado perdurará en cada nota de merengue que hizo vibrar a generaciones.
Rubby Pérez no solo fue un artista excepcional, sino también un símbolo de resiliencia y pasión. Su música seguirá siendo un homenaje eterno a su vida y su contribución al arte. 🎶✨
Comentarios