Parece tontería pero el color rojo aplicado a este tipo de usos es verdaderamente útil ya que desvía la atención, es decir, todos mirarán en este caso la liga de pelo pues el rojo es un color extremadamente llamativo entonces su vista no estará en ti sino en la liga de pelo, funciona en psicología y funciona en la práctica, misterio… no sé, pero de alguna forma la carga de energía negativa no llega.

La cinta o hilo rojo, se cree, es un potente amuleto capaz de absorber y repeler las energías negativas. La kabbalah judía es una de las tradiciones que lo utiliza. En hebreo, el mal de ojo tiene un nombre, «ayin ha’ra», y se asocia con el poder de causar daño con una mirada. Las personas que no pueden activar un campo protector contra esto, ven mermada su buena suerte, su conexión. Según una antigua leyenda, Raquel, la gran matriarca, dio a luz a dos hijos luego de años de infertilidad, es por eso que enrollar un hilo siete veces en la muñeca izquierda activa sus poderes protectores. 

«El color rojo lo usaron mucho los nativo americanos para protección energética, para resguardar los cristales y los objetos ceremoniales. Es el color mas bajo del espectro, rechaza todas las otras frecuencias, por eso se usa como protector. Los antiguos, como siempre, intuyeron esto». 

El espectro de color visible al ojo humano tiene longitudes de onda que oscilan entre los 400 y los 700 nm. El color rojo se encuentra en un extremo (700), bloqueando cualquier onda que se le presente delante. En síntesis, el rojo le gana a todo. Esto trabaría o cerraría el campo energético humano a interferencias externas.