En primer lugar, la persona en cuestión tiene que ser alguien a quien conozcas o con quien hayas interactuado en alguna ocasión. No vale gente totalmente ajena a tu vida. La ‘youtuber’ lo consiguió con un chico con el que intercambió cuatro palabras en su gimnasio.
¿Preparada?
Medita durante 10 minutos
Intenta hacer un parón, dejar la mente en blanco y concentrarte bien para lo que va a suceder a continuación. Puedes ayudarte de alguna técnica de meditación y conseguir llegar a ese estado mental de calma y tranquilidad.
Define las emociones que tendrías si esa persona te mandara el mensaje
Ahora, es el momento de identificar qué emociones sentirías si esa persona te envía el mensaje que quieres recibir. Si es alegría, imagínate sintiéndola. Si es emoción, ilusión, nervios…, intenta sentirlo. Y regodéate en esas imágenes.
Visualízate recibiendo el mensaje
Intenta ver tu móvil encendiéndose y recibiendo ese mensaje. Puedes inventar el mensaje concreto, un «hola, qué tal» o un «he estado pensando y quiero pedirte perdón», lo que sea, tal cual. Mírate a ti misma cogiendo el móvil y viendo el texto.
Imagina las emociones de la otra persona al mandar el mensaje
A continuación, trata de pensar qué emociones sentirá la otra persona al enviar ese mensaje. Cuál sería su intención y qué experimentaría tras dar a ‘enviar’.
Suelta el móvil y déjalo ir
No te obsesiones, no pienses más en ello, no mires el móvil todo el rato y deja ir a ese deseo. Esto supone que no tienes que estar pensando constantemente en que te vaya a escribir. Hacerlo durante esta meditación es suficiente, la cual, por cierto, puedes repetir varias noches seguidas.
Aquí está el vídeo, por si quieres ver la experiencia completa.
Comentarios