Las plantas de casa transforman tu casa en un lugar placentero. Purifican el aire o disminuyen tu ansiedad, estas tienen grandes beneficios para la salud. Pero también pueden ser tóxicas para tus mascotas.
Algunas plantas, flores y árboles resultan potencialmetne venenosas para animales. Muchas parecen inofensivas, por lo que hay que tener mucho cuidado al escoger las macetas que llevas a tu casa.
Perros y gatos responden diferente a algunas plantas, pero siempre se debe estar alerta y, en caso de sospechas que tu mascota tiene síntomas de intoxicación, debes llevarlo al veterinario inmediatamente.
Aqui te mostramos una serie de plantas con sus efectos en tu mascota:
1.- Azalea: Puede causar vómito, diarrea, baja presión, coma e incluso la muerte.
2.- Ave de paraíso: Irritación oral, saliva excesiva, vómitos, diarrea y dificultad para tragar.
3.- Amaryllis: Su consumo puede provocar depresión, vómito, diarrea, babeo excesivo y temblores.
4.- Narciso: Esta planta puede causar vómito, diarrea, arritmia y convulsiones.
5.- Eucalipto: Puede provocar salivación en exceso, vómito, diarrea, depresión y debilidad.
6.- Jacinto: Puede desatar vómito intenso, diarrea, depresión y temblores.
7.- Hortensias: Son causantes de molestias gastrointestinales como vómito y diarrea.
8.- Iris: Toda la planta es tóxica para los animales y los bulbos son la parte más peligrosa para las mascotas, provocando salivación, diarrea y letargo.
9.- Alcatraz: causa Irritación oral, una sensación de ardor en el hocico y dificultad para tragar.
10.- Ipomoea o Gloria de la Mañana pueden provocar halucinaciones y vómito.
¿Qué hacer si mi mascota come una planta venenosa?
En caso de tener sospechas que tu perro consumió una planta tóxica, no debes esperar una reacción para llevarlo al veterinario, No debes aplicar remedios caseros sino llevarlo directo a que le den atención profesional.
Tampoco le provoques el vomito a tu mascota, a menos que te lo indique un veterinario. Algunas plantas requieren tratamientos específicos para contrarrestar sus daños y obligar a tu mascota a volver el estómago podría dificultar su atención médica.
Identifica la planta que tu mascota comió y tomále una foto o llévala contigo al consultorio. Una vez ahí deberás proporcionar a los veterinarios información como cuándo ingirio la planta, el peso de tu mascota y otra información básica.
Si ya identificaste que hay este tipo de plantas en tu jardín, lo mejor es colocarlas lejos del acceso de la mascota. Es un mito que las mascotas naturalmente evitan las plantas toxicas en realidad ellos no saben y son curiosos.
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